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El radar más moderno de España se está probando en Galicia desde principios de año. Incorpora un sistema que permite diferenciar por su categoría, mediante un lector de matrículas, el tipo de vehículos que pasan por el tramo vigilado. De esa forma se puede saber cuál es la velocidad que le corresponde a cada uno y en cuántos kilómetros por hora sobrepasa el límite fijado en la carretera. Un radar tradicional registra los excesos de velocidad sin tener en cuenta el límite máximo de cada vehículo. Por ejemplo, en una autopista, donde la limitación de 120 km/h es solo para turismos y motocicletas, las furgonetas pueden circular a esa velocidad sin riesgo de ser denunciados pese a tener limitada su velocidad máxima a 90. Tampoco son sancionados los camiones (limitados a 90) y autobuses (a 100), aunque estos vehículos cuentan con limitadores de velocidad y su infracción puede ser verificada a posteriori en los tacógrafos.
El moderno dispositivo de vigilancia se encuentra instalado en el radar de tramo de la autopista AG-55 (A Coruña-Carballo), donde la velocidad máxima está limitada a 100 km/h. La matrícula registrada por el sistema es enviada de forma telemática a una base de datos en la central de denuncias de la DGT en León, donde se comprueba el tipo de vehículo al que pertenece esa matrícula, si es un turismo, una furgoneta o un camión.
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